El propósito.
Muchas veces nos preguntamos: Qué hago con mi vida, para que nací y vine a este mundo?. Responder la pregunta anterior NO se puede contestar o saber si no tienes nada claro, pero es totalmente normal, y te diré porqué. Últimamente he pensado, la vida es un va y un ven ya que hoy nos gusta algo y mañana no, nos gusta otra cosa. Sin embargo, es cierto que todos estamos destinados a ese ALGO, ese ALGO es lo que tenemos que hallar en nuestro interior, ese ALGO es lo que nos dice en nuestro interior, en nuestra alma: »Vamos, levántate». Si es bien, siento que no puedo definir el propósito de alguien con simples palabras vacías que surgen y se van, al contrario, es muy difícil y complicado el encontrar ese porqué de un ser y todavía más si ese ser no sabe para lo que está hecho. El propósito se basa a través de nuestras acciones y sobre cómo reflejo YO mismo mi propio interior hacia el exterior.
Desde ESE día en el que mi razón de ser nace dentro de todo mi ser: mente, alma, corazón y cuerpo, es el día en el que comienzan nuestras vidas en realidad, sí, ese día puede llegar hoy mismo, mañana, o hasta dentro de 50 anos, pero ESE día es cuando nos despertamos y nos damos cuenta porqué. Desde que el propósito nace en nuestras vidas, estas no son las mismas, sabemos y nos damos cuenta justo lo que tenemos que hacer. Todos estamos llamados a ese propósito cada día, nada más que no escuchamos el llamado o simplemente no estamos listos aún. El tren solo pasa una vez y no vuelve más a menos que vayas tras él. Un aspecto importante a recalcar es el hacer todo lo posible para progresar desde que nos decidimos, de nosotros depende el cumplir nuestro propósito, o no?. La habilidad para los propósitos se crea, más no viene desde que fuimos creados, eso sí, te garantizo que ese aspecto si depende un 100% de nosotros mismos, el decir sí o no a esos cambios, a esas decisiones. Dios nos habla en la Biblia en Mateo 13;12 > »Al que tiene le darán y le sobrará, al que no tiene le quitarán aún lo poco que tiene», este es un llamado a usar lo que tenemos, a tener fe y no solo en nosotros sino en Cristo quién es él que quiere lo mejor para nosotros.
Pidamos sabiduría y sobre todo autocontrol como paz para encontrar ese propósito oculto, es cuestión de tiempo y fe. Para finalizar, como siempre me digo a mí mismo y lo invito a usted también a pensar así: »No hay mañana, no existe. Trabaja con lo que tienes hoy y ahora mismo, pero sobre todo, CON FE.